Este informe insta a los países a dictar urgentemente sus propias reglas para el diseño y uso de la tecnología en la educación, de manera que nunca reemplace la presencia de un docente, sino que contribuya a una educación de calidad para todos.
Audrey Azoulay, directora general de la UNESCO, dice que la tecnología “debe utilizarse para enriquecer el proceso de aprendizaje y promover el bienestar de estudiantes y profesores, y no en detrimento de ellos. El alumno debe estar en primer plano y los profesores deben estar en primer plano. Las interacciones en línea no pueden reemplazar la interacción humana”

• Muchos estudios señalan que la integración de la tecnología no mejora instantáneamente la experiencia de aprendizaje. En particular, se dice que el impacto de la tecnología en la educación va más allá del dispositivo que se utilice y depende más de la persona que lo utiliza. Es decir, es más importante la personalización de la enseñanza que el dispositivo o medio que elige como soporte.
• Durante la pandemia de Covid-19, las herramientas digitales y el aprendizaje en línea se volvieron importantes. Sin embargo, los resultados positivos durante este período no se han debido únicamente a la tecnología. De hecho, en el Reino Unido, una encuesta realizada en varias universidades mostró que el 70% de los estudiantes preferían materiales impresos o una combinación de recursos impresos y electrónicos durante la pandemia.

Las tablets, las pantallas, los robots y ahora la aplicación ChatGPT se consideran “innovaciones” esenciales en la enseñanza. “La gente que defiende estas tecnologías ni siquiera es capaz de demostrar que sean útiles. Al contrario, la informatización de las escuelas provoca un déficit de empatía entre los estudiantes, una pérdida de interés por los demás, un sentimiento de soledad y ansiedad”, afirma Sébastien Mussi.

En un poderoso ensayo, “Bienvenido a la Máquina. La enseñanza en la era digital”, los autores Éric Martin y Sébastien Mussi, señalan que la propia profesión de profesor está amenazada por la inteligencia artificial. Piden una “moratoria”, una pausa, en el proceso de informatización de la educación. Comenzaron a escribir su ensayo después de un año de enseñanza a distancia debido a la pandemia. El resultado de los cursos online, según ellos, ha sido pobre. Los profesores hablaron ante una pantalla llena de cuadrados negros, debido a las cámaras apagadas de los estudiantes. La mayoría de los estudiantes estaban desmotivados. El aislamiento causó angustia. Los estudiantes más destacados en general obtuvieron buenos resultados, pero los que no, obtuvieron resultados por debajo de los aceptables.

Entonces, a medida que la IA gana importancia, podemos decir que no todos los cambios tecnológicos significan progreso. La relación presencial docente-alumno sigue siendo fundamental.