Roxana Operuk (RO): soy docente de primer año, una etapa muy especial porque los estudiantes se encuentran con muchos cambios, miedos y frustraciones. Buscamos generar espacios donde ellos puedan compartir sus historias personales, en un ambiente de respeto. La clave es construir una relación positiva desde los docentes hacia los estudiantes y allí, la empatía es fundamental.

Andrea Bogado(AB): El diálogo con los estudiantes constituye una dimensión central. Requiere una mirada atenta y una escucha respetuosa que invite y propicie la construcción de saberes de forma conjunta, valorando las potencialidades de los estudiantes. Esto implica reconocer la complejidad del aula, entendiendo que se trata de un camino, de un proceso.

Sergio Sánchez (SS): Creo que la docencia en la universidad y también las discusiones pedagógicas actuales han tomado un giro reconsiderando a los estudiantes y sus trayectorias como centrales para un proceso de enseñanza y aprendizaje exitoso.
Esto tiene que ver con una revisión que hizo el propio sistema universitario y también se vincula con los efectos de la pandemia y postpandemia.
Quiero remarcar que el desafío de la universidad es doble, porque no sólo recibe a los estudiantes sino que también debe implementar una política de inclusión y contención.

 RO : con el eje en la enseñanza de la Matemática, buscamos promover la participación en la resolución de problemas y actividades prácticas, fomentamos el trabajo colaborativo, actividades con otras áreas, etcétera. La enseñanza no es solo desde lo disciplinar; estamos formando personas.

AB: la invitación siempre es llevar a nuestras prácticas diferentes reflexiones que vamos tejiendo, y seguir aprendiendo en y para el enseñar. Las inquietudes que más me interpelan respecto a la enseñanza y aprendizaje son: ¿Qué es enseñar?¿Para qué enseñamos lo que enseñamos? ¿Qué hacemos con las preguntas que surgen en nuestra práctica?

SS: Podríamos decir que en estos últimos diez años estamos transitando hacia otro tipo de formato del conocimiento. Hemos tenido que replantear los soportes y metodologías con los que trabajamos, las configuraciones áulicas y las dinámicas que les proponemos a los estudiantes para que puedan acceder y producir los conocimientos que planteamos en nuestras planificaciones.
Las prácticas de enseñanza en las aulas universitarias invierten diversos recursos para sostener trayectorias estudiantiles que finalicen en profesionales del mejor nivel.

RO: el concepto de fusión es muy apropiado, porque realmente confluyen diversas estrategias. Por ejemplo, usamos el pizarrón para explicar, para retomar temas, para dejar en claro algún contenido; pero también incorporamos nuevas tecnologías, aplicaciones, programas e Inteligencia Artificial para resolver problemas matemáticos.

AB: las prácticas docentes y de enseñanza son dinámicas y flexibles. Es fundamental sostener y revisar nuestras prácticas desde una mirada crítica ante las modas pedagógicas, y esto implica analizar los fundamentos epistemológicos, las intenciones y los intereses que están por detrás.

SS: Considero que el mundo universitario tiene, por lo menos, dos grandes tradiciones de enseñanza. Por un lado, es un espacio de creación, experimentación e innovación constante, con la puesta en práctica de saberes de vanguardia.